31


Invertí los números,
desafié las apuestas,
y cambié mis opciones
por materia.

Materia de vida,
materia de risa,
y belleza
y compañía
y alegría.

Yo,
las puertas abiertas,
la vida.

Y tú,
mi puerta siempre abierta,
mi vida.

Casi nunca te hablo,
así, en estas palabras,
pero es más que nada
porque te tengo cerca.

Una mirada basta
y el abrazo en la mañana.

A ti, a quien amo
como a jamás nadie
sólo he sabido decirte
siempre: gracias.

Así que, yo
y tú
y las amadas puertas.

Lo tengo todo esta noche
y todo en esta vida.

(Y esta mañana,
eres lo único que falta).

Ah, vida nueva.
Dios, gracias.

1 comentario en “31

Deja un comentario

Este sitio utiliza Akismet para reducir el spam. Conoce cómo se procesan los datos de tus comentarios.