NaNoWriMo – Día 8
Sometida.
En la garganta, la cuerda
que me asfixiaba
con sus hilos invisibles
y sus tejidas telarañas.
Y nadie recuerda.
Rendida.
En el pecho, el agujero
que sangraba,
que dejaba escapar el aire,
que dejaba correr el río
que sólo yo recuerdo. Sigue leyendo