—Careful with that axe, Eugene. «No puedo contra el azul oscuro». —No sigas el agua que bordea el verde de las agujas de los pinos. «But that’s only a ‘breakfast’!».
—Careful with that axe, Eugene. »No sigas por la senda a un alma que no comprenda.
* * *
–Careful with that axe, Eugene. »Y, no sigas por la senda a un alma que no comprendas.
Los ojos cerrados
que miran hacia arriba,
ciegos,
en un espasmo de dolor.
La boca abierta,
y en la garganta
palpita,
muda,
una llaga de dolor
que es lava,
materia del alma,
que punza y supura
la herida más alta:
la suprema falta.